En busca de contribuir a la reducción de la pobreza en diversos países de América Latina, el INTI coordina un proyecto de desarrollo de sericultura sustentable cofinanciado por la Unión Europea.
La experiencia acumulada del Instituto, en el desarrollo de la sericultura, junto a la decisión de la Unión Europea de redefinir las relaciones de cooperación con los países de Latinoamérica y Caribe, dan como resultado la puesta en marcha del Proyecto Seda.
El lugar elegido para realizar la presentación del Proyecto fue el Primer Workshop Internacional de la Seda, una jornada que reunió a expertos nacionales e internacionales que compartieron experiencias de producción, investigación y agregado de valor a dicha materia prima.
La iniciativa tiene como objetivo alcanzar el crecimiento económico sostenible y la mejora en la calidad de vida de las poblaciones rurales de América Latina, a partir de la producción de la fibra textil de la seda. “El objetivo es fortalecer las economías regionales, a través del desarrollo y agregado de valor en territorio, para lograr una Latinoamérica equitativa”, destaco el presidente del INTI, Javier Ibañez, durante la apertura de las jornadas.
“Este encuentro es parte de las iniciativas que llevaremos adelante entre las instituciones de Argentina, Brasil, Cuba, México, Colombia e Italia que somos parte del proyecto”, detalló Ibañez.
De la apertura también participó el jefe de la sección Economía y Comercio de la Unión Europea (UE), Martín Pouliot, quien señaló: “el Programa Adelante de la UE es el marco político para trabajar en conjunto con socios de la región en favor de los países menos industrializados, para alcanzar objetivos de desarrollo”.
Cabe señalar que el proyecto, que liderará el INTI, es uno de los 9 que la UE seleccionó a nivel mundial para cofinanciar con más de 2 millones de euros para su implementación. El financiamiento se realiza mediante el Mecanismo Regional para la Cooperación y la Asociación Internacional, denominado ADELANTE.
“El Programa es un manual de lo que hay que hacer, ya que tiene actores estatales de muchos países que tienen capacidades y participan en conjunto con diversos sectores empresariales, productivos, investigadores y académicos. Es lo que la agenda 2030 le pide a la Argentina para llegar a niveles de desarrollo sustentable que involucren a toda la sociedad”, señaló la Cónsul Ana Sarrabayrouse, representante de la Dirección General de Cooperación Internacional de la Cancillería Argentina.
En tanto la ingeniera Patricia Marino, Coordinadora del Proyecto Seda por parte del INTI, explicó la importancia que tiene el trabajo en el desarrollo de la cadena de valor de la seda para el fortalecimiento económico de la región latinoamericana, ya que involucra actores de todos los sectores. En ese sentido desarrolló, “las diferentes instituciones que somos parte del proyecto podemos trabajar desde la mejora genética del bombyx mori (gusano de seda), la producción de huevos, la implantación de moreras, la producción agropecuaria de los capullos y luego en la utilización de fibras textiles que tiene dos facetas, para uso industrial y una oportunidad desarrollo artesanal para pequeños productores”.
De forma simultánea al Workshop se realizó una exhibición sobre seda arte y tecnología con productores, diseñadores y emprendedores. “Cuando uno piensa en seda, se imagina un raso, pero hay papel de seda, joyas, hilo dental, en nuestro país una artesana hace jabón de seda y hay masaje facial con capullos”, detalló Hugo Enciso jefe del laboratorio de Seda del Centro INTI -Textiles, en relación a la exposición que se realizaba en paralelo a la jornada.
Cofinanciado por la Unión Europea, el presupuesto deberá ser ejecutado entre los años 2017 y 2020. Es coordinado por INTI y participan el Instituto Nacional de Tecnología Agropecuaria (INTA) de Argentina, la Universidad Estadual de Maringá (UEM) de Brasil, la Estación Experimental Indio Hatuey (EEIHA) de Cuba, el Patronato del Centro Turístico y de Capacitación Sericícola y de Rebocería de Jiquilpán (conocido como Casita de Piedra), la Universidad Potificia Bolivariana (UPB) de Colombia y el Sociolario de Italia.
Las experiencias compartidas durante las jornadas, pueden visualizarse ingresando al siguiente link.
Florencia Salgueiro