TECNÓLOGAS

“Transmitir conocimientos en lugares donde los recursos son escasos es muy gratificante”

Carmen Leonilda Silva protagonizó la cuarta edición de “Tecnólogas que transforman”, el ciclo audiovisual de mujeres del INTI que reflexionan sobre sus recorridos laborales en un mundo donde priman las disparidades de género. Sus conocimientos en conservación y restauración sumaron un aporte clave para posicionar al INTI como referente no sólo en el ámbito de la industria sino también en el área social y cultural.

Mirá el video del ciclo #TecnólogasQueTransforman desde aquí

Carmen Silva forma parte del área de conservación y restauración de documentos de la Biblioteca Central del INTI, desde donde asiste tanto a bibliotecas como a archivos y museos de todo el país. Si bien ha trabajado con grandes entidades como Aysa, la Bolsa de Cereales y de Comercio, la Facultad de Medicina de la Universidad de Buenos Aires (UBA), el Servicio de Hidrografía Naval, el Archivo General de la Nación, la Biblioteca Nacional, la Biblioteca del Congreso de la Nación y el Museo Gauchesco Ricardo Güiraldes, entre otras instituciones de diversa índole, destaca que lo que más le apasiona de su trabajo es ir a lugares pequeños (como escuelas o museos del interior), donde los recursos son escasos pero se las rebuscan para llevar adelante sus recomendaciones y consejos, con lo poco que poseen o que tienen que conseguir. “Colaborar en transmitir los conocimientos en lugares donde acceder a éstos es bastante difícil, hizo que esta tarea fuera muy gratificante en tantos años de trabajo”, señaló emocionada Carmen durante la entrevista para el ciclo.

“Nos pasó con un museo de Concepción del Uruguay, donde organizaron ferias, peñas y venta de fideos caseros para comprar chapas de policarbonato o de aluminio que les habíamos recomendado colocar en un espacio donde tenían archivos de diarios (para que no les entrara agua) y una máquina para cortar el pasto (porque la humedad ambiental también podía dañar el papel)”, agrega Carmen, que además de ser licenciada en Bibliotecología y Documentación, es magister y especialista en conservación de soportes de información y profesora universitaria.

Al reflexionar sobre su recorrido durante casi cuatro décadas en el INTI destaca que si bien ella tiene una formación humanística, en ciencias sociales, el instituto le permitió aprender y entender la ciencia y la tecnología, en todos sus aspectos. Además de ser bibliotecaria en varios centros, ha realizado ensayos de diversos tipos en sus laboratorios, experiencia que le permitió entender el “paso a paso” de la tecnología, de la dinámica de un laboratorio y el trabajo bajo normativas de acreditación. “Ese cúmulo de experiencia personal en el laboratorio la trasladé, desde siempre, a los estudiantes de la carrera en diferentes universidades, con el fin de concientizar al profesional bibliotecario/conservador que la ciencia y tecnología no son un ‘cuco’, sino todo lo contrario, un gran mundo maravilloso a descubrir”.

Carmen Silva pudo además acercarla de una manera sencilla a la comunidad, no solamente en la enseñanza universitaria, sino a la hora de hacer diagnósticos y ver el estado de deterioro de diferentes materiales, explicando los beneficios de la ciencia para la conservación de la memoria escrita y su puesta en valor: “Explicar el paso a paso para determinar si un papel o un documento tiene un pH básico o alcalino y que de ello depende su conservación a través de los años, y cómo cualquier persona con capacitación y los materiales necesarios puede hacerlo, genera una gran satisfacción”.


Capacitación sobre Conservación y Restauración de documentos en soporte papel brindada en la Jornada Preservarte, organizada en el Instituto de Formación Técnica Superior Nro. 13 para su alumnos y ex alumnos


En relación a su experiencia agregó que en el ámbito de la conservación no sintió ninguna diferencia laboral por ser mujer, pero sí cierta discriminación sobre los alcances de su disciplina. “Por ejemplo, yo me presentaba en un lugar y luego de diagnosticar el estado del soporte escrito, les decía que había que hacer un determinado ensayo (como medir acidez y alcalinidad) y a veces me miraban con dudas sobre si una bibliotecaria o conservadora podía decirles eso. Cuestionaban, quizás, mis capacidades no por ser mujer sino porque consideraban que eso tendrían que decirlo profesionales de la química o de la ingeniería", explica Silva, que también es la directora de la Carrera de Bibliotecología y Ciencia de la Información de la UBA, cargo que desempeña desde 2013.

Con una mirada puesta en el futuro, anticipa que el día que se vaya del INTI, además de sentirse muy agradecida por todo lo que pudo aprender y transmitir a muchísimas personas, quiere dejar como huella el hecho de haber podido insertar al instituto un poquito más en la sociedad como un lugar donde, además de potenciar la industria, también puede acercarse una biblioteca de una escuela para pedir asesoramiento. “Hoy el INTI es referente en el área de restauración y conservación, no por obra mía solamente, sino de todas y todos los especialistas que trabajamos en esta línea desde hace muchos años”, concluye Carmen.

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