RESULTADOS DE LA ENCUESTA
Durante el XXII Congreso Nacional de Nutrición, llevado a cabo los días 15, 16 y 17 de noviembre, representantes del Departamento de Desarrollo de Procesos del INTI, presentaron un e-poster con los resultados de la encuesta realizada a la población del INTI en julio pasado.
La encuesta interna tuvo como fin investigar si el etiquetado frontal generaba preocupación en relación a la salud al considerar un grupo de alimentos consumidos habitualmente, determinar qué características del envase influyen en la elección de productos y que sucede frente a las versiones reformuladas.Respecto a la caracterización de la población, el 77% de los encuestados tiene estudios universitarios y terciarios completos y la franja etaria predominante va desde los 30 a los 50 años. Cuando se les informó sobre la ley 27642 de Promoción de la Alimentación Saludable, más conocida como Ley de Etiquetado Frontal, y se les preguntó si conocían los sellos de advertencias nutricionales, el 99% de los encuestados conocía todos o algunos de los sellos. El 60.3% del total de los encuestados se preocupa al ver sellos de advertencias en alimentos de consumo habitual. De este grupo, la mayoría menciona preocuparse por llevar una alimentación saludable, mientras que el resto refiere su inquietud a padecer alguna condición de salud. Los tipos de sellos que más preocuparon fueron exceso en azúcares, exceso en sodio y exceso en grasas saturadas. Cuando se les preguntó si un alimento que solían consumir habitualmente ahora llevara sellos de advertencias si lo elegirían igual, el 66% del total de los encuestados afirmó que sí, aunque la mayoría de ellos lo percibía como menos saludable. Al presentarse tres categorías de alimentos (queso, yogur y galletitas) con dos productos a optar por categoría, se analizaron las características del envase que más condicionaron la elección de cada uno de los alimentos en la misma categoría. El color e imágenes en los envases tuvieron una influencia menor en la elección del alimento en todas las categorías, en comparación con el tipo y cantidad de sellos de advertencia. Esto sugiere que los consumidores están enfocando más su atención a los sellos que a la presentación global visual. Cuando se compararon dos alimentos de una misma categoría con sellos de advertencia en sus envases, los encuestados optaron mayoritariamente por el alimento con menos sellos en todas las categorías presentadas. El trabajo revela que un porcentaje significativo de la población encuestada percibe un riesgo para su salud al ver sellos de advertencias en los alimentos. Sin embargo, la gran mayoría seguiría eligiendo el producto con sellos si lo consumía habitualmente. Esto sugiere que, aunque los sellos de advertencia generan cierta preocupación, la fidelidad hacia los productos es fuerte entre los consumidores. Concluimos además que se observa una apertura positiva hacia los productos reformulados (sin sellos), siempre que estos cumplan con las expectativas en cuanto al disfrute y la calidad del producto. Los resultados también indican que los consumidores estarían dispuestos a cambiar sus hábitos alimenticios, si se les ofrecen alternativas saludables y atractivas visualmente.Se cerro la encuesta con la siguiente frase: “¿Sabías que la mayoría de los sellos negros están calculados en función de las calorías del producto? Es por eso que sugerimos que al comparar dos alimentos mires además de los sellos, la tabla nutricional de cada uno, para ver los valores absolutos que aporta cada alimento del nutriente que te preocupa “. La finalidad es esta frase brindar información sobre la adecuada interpretación de los sellos de advertencia nutricional, que son una herramienta más junto con la tabla de información nutricional y la lista de ingredientes para obtener información más completa del perfil nutricional del alimento.
Comunicación interna